La ciencia está por todas partes, echa un vistazo a tu alrededor y seguro que te surgen un montón de preguntas acerca del mundo, ¿por qué el cielo es azul?, ¿cómo es posible que los barcos floten y los clips no? o ¿qué causa las olas en el mar? La ciencia busca respuestas a todas esas preguntas de una forma razonada y organizada, utilizando un proceso llamado método científico.
El método científico tiene varias etapas:
1. La pregunta. Observas algo que quieres conocer y te planteas una pregunta.
2. Información e investigación sobre el tema. Tendrás que leer libros, buscar en internet, pensar mucho, preguntar a expertos…
3. La hipótesis. Una vez realizada la investigación estás en condiciones de hacer predicciones y formular una hipótesis, es decir, con los datos que tienes respondes a la pregunta.
4. El experimento. Diseñas un experimento para comprobar si tu hipótesis es cierta.
5. Análisis de los resultados del experimento y conclusión. El experimento puede respaldar la hipótesis, pero muchas veces no lo hará. En este caso no hay que desanimarse. Un experimento fallido aporta nueva información que te servirá para formular otra hipótesis.
En la vida diaria también aplicas el método científico, pero sin darte cuenta. Supongamos que tu libro de matemáticas no está en tu mochila del cole.
1. Pregunta. ¿Dónde está el libro?
2. Investigación. Piensas en cuando lo usaste por ultima vez, recuerdas si se lo prestaste a alguien, preguntas en casa…
3. Hipótesis. Crees que lo dejaste olvidado en la biblioteca.
4. Experimento. Vas a la biblioteca y preguntas si han encontrado tu libro. Te dicen que si y te lo devuelven.
5. Análisis y conclusión. Lo habías dejado olvidado en la mesa de la biblioteca.
Supongamos que el libro no está en la biblioteca. Entonces, utilizando la información que has obtenido en tu experimento, formulas otra hipótesis: el libro puede tenerlo un amigo con el que fuiste a estudiar a la biblioteca. Probablemente lo guardó en su mochila por error. Ahora tu experimento será llamar a tu amigo y pedirle que mire en su mochila.
Los padres tienen la responsabilidad de elegir las actividades que según su criterio son seguras para sus hijos. Todas las actividades propuestas en Educaconbigbang deben estar siempre supervisadas por un adulto.